Apenas medio mes más tarde de que los técnicos aconsejaran un trasvase de 7,5 Hm3 solo para consumo humano, el Memorándum firmado por Cospedal obliga a enviar 38 Hm3 sin miramientos. La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía denuncia nuevamente el sinsentido de esa tarifa plana, que no atiende a las aportaciones del río y condena perpetuamente a vivir una situación en teoría extraordinaria, como es el nivel 3.
“No se puede estar en misa y repicando, no se puede defender el legado de Cospedal en materia hídrica y a la vez defender el Tajo y nuestros embalses”, advierte el presidente de la Asociación de Municipios Ribereños, Francisco Pérez Torrecilla. “No es una cuestión de colores políticos, es la cruda realidad que en negro sobre blanco nos obliga a trasvasar agua, sí o sí, a cambio de un porcentaje ridículo de aumento en la reserva mínima”, lamenta. “Es como si a un mileurista le aumentas el sueldo veinte euros a cambio de perder cualquier tipo de control sobre su horario laboral; sí, cobra veinte euros más, pero pierde cualquier atisbo de calidad de vida”.
Los ribereños condenan así el sinsentido firmado por María Dolores de Cospedal, “a la que únicamente recuerdan con honores de presidenta en su partido regional, porque en Génova no quieren ni oír hablar de ella”, señala Pérez Torrecilla. Hace un mes, los técnicos del ministerio consideraban que no hacía falta agua de riego en el levante, debido a las fuertes lluvias que habían provocado incluso problemas en el post-trasvase; hoy, haga falta o no, es obligatorio trasvasar porque en el nivel 2, así lo marca una ley que atenta contra la Directiva Marco del Agua. “Y los mismos que defienden su firma, condenarán este nuevo trasvase… o no, quizás vuelvan a callar porque su jefe de filas, Pablo Casado, se ha comprometido con el SCRATS a defender los intereses de un sindicato privado en vez de los de toda una nación”, apunta el presidente de los ribereños.
“Tanto presumir de nación y envolverse en la bandera de todos, pretendiendo hacerla suya, para luego olvidar que su obligación es defender el patrimonio de todos los españoles, su Medio Ambiente, su río Tajo, su Mar Menor”, advierte Pérez Torrecilla. “No hace falta salir de la Región de Murcia para comprobarlo, cada vez son más las voces que, como el escrito Jerónimo Tristante en las páginas de La Verdad o los miembros de la Plataforma Pacto por el Mar Menor, desmienten la interesada idea de la guerra entre comunidades, porque esto no es un combate entre Castilla-La Mancha y Murcia, es un enfrentamiento entre España y unos pocos aguatenientes que quieren esquilmar nuestros recursos para hacer negocio a nuestra costa”.
