La organización agraria Coag ha alertado de las diferencias existentes entre los precios en origen que perciben los agricultores y los que se fijan en destino en cultivos clave para Extremadura como la ciruela o el ajo, lo que unido al aumento de costes afecta a la rentabilidad de las producciones.
El responsable regional de Coag, Juan Moreno, ha explicado a Efe que las dificultades que vive el campo en los últimos años se han agravado como consecuencia del actual escenario económico, en el que “crece la especulación”.
A su juicio, uno de los principales problemas es la diferencia entre el precio que se paga al agricultor por el producto y el que posteriormente desembolsa el consumidor en las tiendas, una situación que es “alarmante” pese a la Ley de la Cadena Alimentaria.
La ciruela y el ajo son dos de los productos en los que hay más diferencial, unos productos fundamentales para Extremadura en general y en zonas específicas de la comunidad autónoma en particular, según Moreno.
Unos sectores que, como acontece con el resto de cultivos agrícolas, ha indicado, están ya “en riesgo” pues a esta circunstancia se une, entre otras, el incremento de los costes de producción.
Este escenario afecta en gran medida al consumidor, ya que Moreno ha afirmado que “se pueden tomar todas las medidas que se quieran para minimizar el impacto del crecimiento de la cesta de la compra, pero hasta que no se controle la especulación en el proceso que va del productor al usuario todo lo que se haga será en balde”.
A datos de septiembre de 2022 el precio del ajo en origen se encontraba en 0,68 euros el kilo, mientras que en destino era de 5,92, un 771 por ciento de diferencia, ha precisado.
Otros incrementos muy significativos son por ejemplo la uva de mesa, un 590 por ciento, con 0,62 euros/kilo en origen y 4,28 en destino; la ciruela, con un 539 por ciento de diferencia; la aceituna de verdeo (un 288 por ciento) o la nectarina (un 258 por ciento). EFEAGRO
