EFEAGRO. Predecir cosechas o analizar el estrés hídrico de las plantas son algunas de las posibilidades del manejo de datos en el sector de la agricultura, según han puesto de manifiesto diversos expertos en Expo AgriTech, ‘la feria del campo 4.0’, que ha arrancado en Málaga este jueves.
Saber con antelación la cantidad de frutas que se van a obtener y su calibre permite organizar la comercialización, según ha destacado a EFE la directora de Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i) y Sostenibilidad de la principal comercializadora nacional de aguacate, la cooperativa malagueña Trops, Paula Ruiz.
Los casi 4.000 productores de esta compañía generan datos en sus explotaciones y la empresa trabaja con esa información de manera conectada en un entorno de soberanía y gobernanza.
Homogeneizar información
Ruiz ha explicado que los retos son la homogeneidad de la información, que esté bien etiquetada y organizada para su explotación posterior, y convencer a todos los agricultores -la mayoría en Trops lo hace- de que proporcionen los datos a través de una aplicación, de cara a soluciones que se pueden desarrollar a partir de ahí.
Con los datos de lo que ocurre en la finca, como el riego que aplican, buscan anticiparse, saber en qué puntos tienen que mejorar y automatizar procesos.
A raíz del análisis de los datos, pueden determinar por ejemplo el personal que van a necesitar para cubrir una campaña.
Hace tiempo que saben cómo irá su campaña de aguacate, que acaba de empezar, y aún les queda un poco para predecir la del mango del año que viene.
«El campo 4.0 está aquí»
«El campo 4.0 está aquí, es el presente», es rotunda la responsable de un departamento creado en Trops hace casi siete años, mientras que el de técnicos agrónomos de la compañía investiga desde más de dos décadas.
Por su parte, el catedrático de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad de Málaga (UMA), José Francisco Aldana, ha asegurado a EFE que «poder predecir con precisión en qué momento vas a recibir la cosecha, permite saber cuándo tienes que colocarla en el mercado».
También «poder planificar la recogida de productos desde el punto de vista logístico o poder analizar el estrés hídrico de las plantas».
Ha resaltado la importancia del vuelo de drones para supervisar lo que pasa en una explotación agraria, monitorizar la calidad o saber si es adecuado el consumo de agua que se efectúa de acuíferos subterráneos.
El Instituto de Tecnología e Ingeniería del Software de la UMA se encarga de estas cuestiones sobre los datos y lleva muchos años aplicando conocimientos a la agricultura de precisión.
Han creado un centro demostrador de espacios de datos federados en el sector agrícola en Andalucía, proyecto financiado por el Gobierno central y que cuenta con la colaboración con la Junta de Andalucía para dar a conocer estas tecnologías y la importancia para el sector de desplegar el valor de datos relacionados con la producción agraria.
Soberanía digital
También ha destacado que se trata de compartir datos en espacios seguros, fiables y donde se mantenga la soberanía digital y que «la propiedad del dato no se vea puesto en solfa», al tiempo que admite que la confianza al intercambiar datos con terceros «es una de las barreras más grandes».
Frente a grandes plataformas que agrupan tecnologías, con cierta resistencia del sector al dejar de tener control de los datos, cree que «interesan modelos más abiertos donde los datos queden bajo control del dueño de los datos y te puedas cambiar de proveedor de servicios con más facilidad», como ocurre con la portabilidad de un número de teléfono, aparte de que la competencia supondría precios más bajos y mayr innovación.
En la UMA han creado también un centro de innovación e investigación en espacios de datos que es más transversal.